Este pequeño Crucifijo (97 cm.), dado a conocer en los años 50 por Martín González, que lo atribuyó a Juan de Juni, estaba situado en un retablo barroco de la iglesia parroquial de Olivares de Duero (Valladolid). En la actualidad se conserva en la nave del evangelio de la parroquia de San Pelayo, donde forma parte de un Calvario facticio con un San Juan y una Virgen María de hacia 1600 (Foto 2).

En 1953 estaba articulado en los hombros pero las articulaciones se consideraron fruto de una intervención para utilizarlo en una ceremonia del Descendimiento, y en la restauración a la que fue sometida la pieza en 1998-99 por la Diputación Provincial de Valladolid con la colaboración de la Junta de Castilla y León y el Arzobispado de Valladolid, se fijaron los brazos.

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REFERENCIAS:

MARTÍN GONZÁLEZ, Juan José, "Atribuciones de obras de escultores españoles del siglo XVI", en: Boletín del Seminario de Estudios de Arte y Arqueología, Valladolid, vol. 20 (1953-54), pp. 199-200 (lam. I). Disponible: https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=2714308

En internet: http://artevalladolid.blogspot.com/2013/09/los-crucificados-de-juan-de-juni-en-la_10.html