La imagen del Cristo de Cantillana (Sevilla), fue ejecutada en 1583 por Juan de Santamaria, conservándose el contrato del encargo, que supone por ahora el dato más antiguo que se conserva de la cofradía de la Soledad. Fechado en el 13 de enero de dicho año, Martin Blasco como “vecino de la Villa de Cantillana que soy al presente mayordomo de la cofradía de la Soledad de nra señora de la dha villa” concierta con Juan de Santamaría, ante el escribano publico Juan Bernal de Heredia a cargo por esas fechas del oficio, sito en la calle Tundidores, actual Hernando Colón de capital Hispalense, la realización de un conjunto de Imágenes con sus andas procesionales. Para el desarrollo de la ceremonia del Descendimiento, Entierro y Resurrección se especifica la ejecución de:
“… un Cristo fecho de gonces que sirva de descendimiento de cruz e para el sepulcro con las potencias doradas e corona de espinas verdes (…) un sepulcro de madera, e cinco Ángeles de blanco doradas las guarniciones e cabellos e alas con las insignias de la pasión que se les pueda quitar y poner (…) las pariguelas al olio pintadas de negro y más una imagen de nra sra de pasión con su manto de balleta negra y su sudario con la corona de espinas y tres clabos y un calvario con su cruz de color de madera con su retulo al derredor con sus pariguelas…”
El Cristo es una imagen de tamaño natural con los brazos articulados, realizado con telas encoladas y pasta de celulosa sobre un armazón de madera, la fragilidad del material en que está concebido hizo que llegase hasta nuestros días en deficientes condiciones, a lo cual hay que sumar los empastes y repintes con pintura sintética que sufrió en una desafortunada intervención en los años 70 del siglo XX. Sus articulaciones fueron suprimidas y fue cayendo progresivamente en el olvido, y a la par degradándose su estado de conservación, hasta que se emprendió la restauración de la imagen, que llevó a cabo Miguel Ángel Fernández en los años 2013-14. Se recuperaron entonces las articulaciones y el Sepulcro, y desde 2014 ha vuelto a hacerse el Desenclavo en la localidad haciéndose la ceremonia el cuarto domingo de Cuaresma.
Antiguamente se hacía delante de la ermita de la Soledad, en cuyo atrio existía un estrado de piedra con un hueco en el centro para encajar la cruz, el cual todavía se conserva en las dependencias de la hermandad.
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REFERENCIAS:
CAÑIZARES JAPÓN, Ramón, "Las hermandades de la Soledad en el antiguo Reino de Sevilla", en: Boletín de las Cofradías de Sevilla, nº 609-612 (2009-2010), p. 874. Disponible: https://www.academia.edu/42332198
DOMÍNGUEZ, Francisco J. "Cristo desciende en la provincia", en: El Correo de Andalucía : Especial Semana Santa 2017, pp. 50-51. Disponible: https://issuu.com/elcorreodeandalucia/docs/especial_semana_santa_2017_mp7
GARCÍA de PASO REMÓN, Alfonso, Arte y Dramaturgia del Descendimiento de la Cruz en España, Asociación para el Estudio de la Semana Santa, Estudios Monográficos nº 4, Zaragoza, 2019, cat. nº 84.
FERNÁNDEZ MUÑOZ, Pedro Manuel, “Iconología e iconografía de Cristo Yacente. Origen y evolución”, en: Religiosidad popular: Cofradías de penitencia / coord. por Francisco Javier Campos y Fernández de Sevilla, Real Centro Universitario Escorial-María Cristina, El Escorial, 2017, vol. 2, pp. 893-918 (p. 907). Disponible: https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=6193493.
En internet: http://www.artesacro.org/Noticia.asp?idreg=93934
BARRANCA DAZA, J. M.: http://soledadcantillana.blogspot.com/2009/11/el-santo-cristo-del-sepulcro.html http://soledadcantillana.blogspot.com/2014/03/el-sermon-del-descendimiento.html