Óleo del paisajista de Haarlem Philips Wouwerman (1619-1668) que estuvo en la Galería Johnny Van Haeften Ltd. de Londres.

A los pies del monte Calvario hay un río o lago y en su orilla, con los calzones bajos, defeca un personaje que vuelve la cabeza hacia los soldados que se juegan a los dados la túnica de Cristo. La presencia de este cagón, frecuente en obras flamencas en escenas de Kermis, quizá haya que ponerla en relación con los cagones de los belenes catalanes, valencianos, napolitanos, murcianos, portugueses y canarios, símbolos del ciclo de la vida y/o contrapuntos cómico-subversivos que acercan lo profano a lo sagrado y lo divino a lo grotesco.

Probablemente en este caso, como también en los cagones de los belenes, se trate de resaltar la naturaleza humana de Cristo, en razón de la cual nació como los demás hombres entre excrementos y orina, muriendo de la misma manera en un mundo lleno de inmundicia.

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REFERENCIAS:

WERNER, Florian, La materia oscura. Historia cultural de la mierda, Tusquets, Barcelona, 2013, pp. 108-109.

En internet: http://www.birgitschumacher.com/ http://www.pubhist.com/person/132/philips-wouwerman http://www.wouwerman.org/ http://www.wouwerman.de/
Foto: https://thisisyogic.files.wordpress.com/2012/10/wouwerman.jpg